Iniciar un tratamiento como este es un paso importante hacia la eliminación del vello no deseado, pero también es común que surjan preguntas e inquietudes, especialmente tras la primera sesión de depilación láser. A medida que se avanza en el proceso, es esencial comprender cómo responde el cuerpo al tratamiento, cuáles son los signos que indican que está funcionando y qué esperar en cada etapa del camino.

¿Qué sucede con el vello después de la primera sesión de láser? 

Entre las preguntas más comunes que muchas personas se hacen tras la primera sesión de depilación láser están: qué sucede con el vello tratado y cuánto tarda en caerse el pelo. La respuesta a esta pregunta depende del tipo de piel, la densidad del vello y la zona del cuerpo tratada, pero hay algunos patrones generales que se pueden esperar:

El vello desaparece

Tras la primera depilación láser, uno de los efectos más notables es la desaparición del vello en la zona tratada. Este proceso puede no ser inmediato para todas las personas, ya que en algunos casos, el vello puede persistir por un breve periodo antes de comenzar a caer de manera natural. Es importante entender que el láser quema el vello desde la raíz, por lo que algunos folículos pilosos, especialmente aquellos que contienen vello fuerte y oscuro, pueden dejar pequeños restos negros en la piel, que son simplemente restos del vello quemado.

Enrojecimiento e irritación

Es completamente normal que la piel tratada experimente enrojecimiento y una leve irritación tras la primera sesión. Estos síntomas son temporales y suelen desaparecer en un plazo de 48 horas. Durante este tiempo, también es posible sentir un ligero picor o sensibilidad en la zona tratada. Para ayudar a la piel a recuperarse, se recomienda evitar productos que puedan empeorar la irritación, como pueden ser aquellos que contienen alcohol, y optar por ropa cómoda que no roce o comprima la piel.

Tener en cuenta el post-tratamiento 

Tras la primera sesión de depilación láser también es importante cuidar adecuadamente la zona tratada para evitar complicaciones y maximizar los resultados. Para ello, hay que tener en cuenta:

  • Evitar la exposición al sol. La piel tratada es más sensible a los rayos UV, por lo que se recomienda evitar la exposición directa al sol. Si esta fuera inevitable, lo ideal sería usar protector solar con un FPS alto.
  • Evitar la piscina y el deporte intenso. El cloro y el sudor pueden irritar la piel recién tratada, por lo que es mejor evitar nadar y hacer ejercicio vigoroso durante al menos 48 horas.
  • Hidratar la piel. Usar cremas calmantes y emolientes para mantener la piel hidratada y acelerar su recuperación.

Indicadores de que la depilación láser está funcionando

Uno de los mayores desafíos al iniciar el tratamiento es evaluar si realmente está funcionando. Es normal que, tras la primera sesión de depilación láser, se observe que el vello vuelve a crecer y esto hace suscitar muchas dudas. Sin embargo, este es un paso esperado en el proceso de depilación definitiva.

El vello nuevo crece débil y fino

Uno de los primeros signos de que el tratamiento está funcionando es la aparición de un vello más fino y débil. Este debilitamiento indica que el folículo piloso ha sido dañado por el láser y ya no puede producir vello grueso y fuerte de la misma manera que lo hacía antes del tratamiento. Al no tener la misma fuerza, suele caerse con facilidad, ya sea durante la ducha o debido a la fricción con la ropa.

Acelerando la caída del vello

Aunque no es necesario intervenir para que el vello tratado se caiga, se puede acelerar este proceso utilizando un guante de crin para exfoliar suavemente la zona durante la ducha. Se recomienda esperar al menos cinco días después de la sesión para realizar esta exfoliación, evitando así posibles irritaciones.

Fases del crecimiento del vello: Un factor clave en el tratamiento

Es importante entender que el vello no se desarrolla de manera uniforme al mismo tiempo. Además, existen tres fases del crecimiento del vello: la anágena es la de crecimiento activo, la catágena es una fase de transición y la telógena es la fase de reposo. El láser es más efectivo durante la fase anágena, cuando el vello está en crecimiento activo y el folículo piloso es más vulnerable.

¿Cuál es el mejor momento para reservar la siguiente sesión?

Después de la caída del vello debilitado hay un periodo de tiempo en el que no será necesario recurrir a la depilación, pues el vello parece haber desaparecido. Este momento puede durar varias semanas. Sin embargo, es fundamental recordar que el pelo que se encontraba en fase de reposo (telógena) durante la primera sesión, comenzará a crecer más adelante. Este es el mejor momento para programar una segunda sesión de depilación láser, generalmente entre 6 y 8 semanas después para las zonas del cuerpo, y entre 3 y 4 semanas después para el rostro.

Cada sesión posterior reducirá aún más la cantidad de vello, hasta que finalmente se elimine por completo. Es esencial seguir las recomendaciones de las que hemos estado hablando sobre cuidado post- tratamiento y continuar con las sesiones programadas para obtener los mejores resultados.

Si tienes alguna duda o inquietud sobre tu tratamiento de depilación láser, no dudes en ponerte en contacto con nuestro equipo de Láser Oviedo. Estamos aquí para guiarte en cada paso del proceso y asegurarnos de que obtengas los resultados que deseas de manera eficaz y segura.